Mirando su Cara
Se atan la cara y el discurso. La cara habla. Habla, es en esto que hace posible y comienza todo el discurso. Acabo de rechazar la noción de la visión para describir la relación auténtica con la otra; es discurso, y, más exactamente, la respuesta o la responsabilidad que son esta relación auténtica.
Emmanuel Levinas, El Etica e Infinito
Aparte de la inconveniencia de ser en la compañía de cada una y otra, él realizó que él no sentía la misma expectativa, agitación u obligación que marcaron sus encuentros pasados. Quizás era el silencio o la distancia, o el finalidad de las palabras habladas antes, que salido no más para discutir. Lo que era, él conocía que esta inconveniencia que él se sentía era solamente temporal, una inconveniencia que disolvería tan pronto como la tarde terminara, tan pronto como él consiguiera en su coche para ir. Fuera de vista, fuera de la mente.
Es igual la falta de memoria entrenada que lo ha mantenido sano con los días y los meses que seguían su separación. De hecho, es una falta de memoria entrenada que tiene llegó a ser menos y menos difícil como los días pasaron con la merced. Esto significó solamente que él finalmente conseguía “librado” de ella, de su olor, de su presencia, de su memoria. Él no recordó su cara. Pronto, él se olvidará de muchas otras cosas. Y él puede finalmente vivir normalmente otra vez.
Pero él sabía que él no estaba allí todavía. Pronto, y lentamente. Para mientras que él sabía que se puede quedarse en el mismo cuarto con ella, o quizá hablando con ella, o iguale quizá hacer su amigo, él sabía que él todavía no podría mirarla sin la sensación de la misma dificultad o lamentarlo se sentía siempre que él estuviera alrededor de ella. Y él también no podría tolerarla que lo miraba. Él temió eso con estos vistazos más leves, esta seguridad frágil y construida la suya lo desenredaría y dejaría vulnerable y perdido con todo otra vez.
Y por eso, él deseó decirle (como si su entero que es quemado en estas mismas declaraciones) que cuando se encontrieron en la calle, o se vieron en las fiestas, nos dejó no mirar uno a otro. Él no significó ningún desacato por esto. Ella no necesita preocuparse, él podría hablar con ella, podría reir a ella, iguala quizá podría decir una broma (de la manera distraída él era siempre que sea nervioso o afectado). Pero en todo el esto, él no la miraría, y él quisiera que ella no lo mirara. No deben mirar uno a otro. No todavía. A fin de lleguen a estar vivos de nuevo al uno a otro. Él era seguro que ella convendría: viviendo con un fantasma es bastante difícil.
AYON:)
Beautiful, PJ, really. Ano na nga ba mantra natin? We'll be fine. Although ghosts never really leave us, they eventually become friendly anyway, sabi nga ni Paul Mc Cartney, like Casper, haha! Anyway.
I'm here, and we can wait together until the best finally comes. Mi casa su casa, camarada. I mean it.
Posted by Anonymous | 6:16 AM